El entre Inglaterra y Senegal, por los cuartos de final del Mundial de Qatar 2022, tuvo un tinte polémico en los primeros minutos del juego cuando a los africanos les dejaron de sancionar un posible penal.
Sobre el minuto 22 de juego llegó una acción de ataque en favor de los africanos con un remate de Boulaye Dia que pegó en la mano de John Stones.
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El atacante senegalés reclamó airadamente la acción pidiendo que le dieran un penal que el juez omitió.
Desde el VAR también revisaron la acción pero consideraron que no era sancionable con penal. Esto, aparentemente, porque el balón pegó en la pierna del defensor inglés ante de dar en su mano.
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