Luego de que se ratificara a Colombia en la cuarta posición del Torneo Maurice Revello, antiguo Esperanzas de Toulon, quedaba por definirse la gran final entre Venezuela y Francia.

El cuadro ‘Vinotinto’ venía de eliminar al seleccionado de Héctor Cárdenas por la vía de los penales; por su parte, Francia se había sacado del camino a México al golearlo por 4-1.

Era evidente el dramatismo en cada instante del partido. Desde el inicio se tornó de ida y vuelta, con salidas para ambas selecciones en aras de llevarse el título. Cabe recordar que Venezuela afrontaba una participación inédita, puesto que no había tenido la oportunidad de competir en las justas; por su parte, Francia se había metido a su final °27 del torneo.

Un inicio redondo para Venezuela

Apenas sobre los ocho minutos del cotejo, la ‘Vinotinto’ festejaba el primer tanto del compromiso por obra y gracia de Telasco Segovia. El volante de primera línea pisaba el área tras una jugada maravillosa.

Daniel Pérez estaba a medio paso de llevarse su gol tras una jugada explosiva por el costado derecho; sin embargo, el arquero francés se vistió de héroe y le achicó el ángulo de tiro. Lo que nadie se esperaba fue que Segovia partía desde atrás, con decisión y temperamento, para empujar el balón con el arco vacío.

Los sudamericanos iban a ser partícipes del cotejo con más oportunidades de gol. El contraataque era la especialidad de la casa, dado que el volumen de ataque francés era notable. La cuestión radicó en que Venezuela perdonaba ya y merecía el segundo, cuando terminaba el partido y ambos equipos se iban al descanso.

Un viejo conocido apareció en la tribuna. José Néstor Pekerman, actual seleccionador del equipo absoluto, estaba muy atento a la actuación de la ‘Vinotinto’.

Segundo tiempo con remontada a la mano

Francia cambiaba un poco el chip. Se volvió más intenso en la búsqueda de un gol prematuro. La posesión logró traducirse en buenas oportunidades de gol, mientras que los venezolanos se mostraban más nerviosos. Muchas tarjetas amarillas se sacaron en el cotejo, con un total de 9 (todas para Venezuela y un expulsado por acumulación, quien fue Emerson Ruiz).

A los 9′ de complemento, Francia se hacía sentir y marcó el empate del partido gracias a Maghnes Akliouche, el joven futbolista del Mónaco que deslumbró tras un formidable control de balón. El volante ofensivo remató justo a la esquina del arco venezolano, por lo que nada pudo hacer el golero.

Venezuela metía presión ya para quedarse con la victoria, pero los franceses no consideraban el desperdicio de sus ocasiones. A los 80 minutos, Nathanael Mbuku se mandaba un golazo y finiquitaba la remontada.

Desde 25 metros aproximadamente, la joya arremetió y sacó un disparo extraordinario hacia el poste lejano del golero venezolano. Nuevamente Samuel Rodríguez solo podía mirar el balón, mientras la efusividad era protagonista.

El seleccionado francés, dirigido por Bernard Dioméde, se consagraba campeón una vez más del prestigioso torneo en el fútbol juvenil.